
Hace unos días vino a mí un irrefrenable antojo de sanguchitos. Sabía que la Barrita Sanguchera, nueva en Lastarria, estaba comenzando a coquetear con el público y tenía buenas referencias. No lo dudé y fui a probar sus preparaciones.
La primera impresión fue bastante buena. El local, aunque pequeño, resultó bien acogedor. Me dieron la carta y lo primero que pedí fue una cerveza, mas no tuve suerte. Todavía no tienen la patente y, de momento, sólo ofrecen sin alcohol. Mal ahí, pues su slogan -al menos el que aparece en sus individuales impresos- es “Cerveza y Sidra”. Ok, no importa.
Me aventuré con la “hamburguesa criolla” ($6.500), que cuenta con una carne de 150 gr. con lechuga, tomate, cebolla morada, tocino ahumado, mayo casera, papitas hilo y cheddar. Muy sabrosa, hay que decirlo. Esperaba una porción más abundante de papitas hilo. La verdad es que apenas las sentí y en un momento casi dudé de su existencia. Sin embargo, el resto de los ingredientes estaban bastante bien. La mayo, rica.
Me sorprendió la gran cantidad de queso cheddar. Parecía una burger típica gringa pero con un toque peruano. Bien. Rico y abundante. Las papas rústicas que acompañan el sanguchote tienen buen porte y crocancia, aunque la porción podría ser un poquito más grande.
No es la mejor hamburguesa de Santiago pero es una buena propuesta, con mucho potencial. Cumple y le viene bien al barrio. Es muy sabrosa y son generosos con los ingredientes, lo que hace de esta preparación un plato bien contundente. Se recomienda, pero necesitan tener cerveza lo antes posible. Digo, hay que aprovechar la barrita. ¡Volveré por más!
Precio promedio por persona: $10.000.
José Victorino Lastarria 105 B, Santiago.