El sector de Paris y Londres, en pleno centro de Santiago, se ha vuelto visita segura para compatriotas y extranjeros. Se trata de un barrio pequeño, pero de arquitectura muy tradicional y donde los restaurantes y establecimientos gastronómicos se han adaptado de buena forma a esa realidad.
Uno de esos es el Café Barrios, lugar sencillo pero muy cumplidor. Ubicado al costado de la iglesia San Francisco (Londres 22), este local se ha ganado su clientela a punta de buenos productos. Lo digo porque he probado varias cosas, dulces y saladas, y realmente todo es rico.
Como lo he dicho en otras reseñas, soy amante del café. Lo bebo a diario y mi favorito es el cortado. El que aquí preparan es exquisito y con buena espuma de leche, algo fundamental para los fanáticos. Y si quieren acompañarlo, hay buenos sandwiches o tortas, pasteles y las clásicas medialunas. En mi caso escogí un ave palta que viene en pan de molde, con buena cantidad de pollo y palta.
¿Qué le puedo criticar? La atención. No es mala, pero me tocó un mesero muy despistado, preguntando más de una vez lo que quería y eso realmente me pudre. Si la memoria es frágil, mejor anotar y problema solucionado. En cuanto a precios, es un poco más caro que cualquier café tradicional, pero no lo alcanzo a considerar un abuso.
